Entrevista a Santiago Posteguillo autor de ‘Yo, Julia’

Santiago Posteguillo autor de 'Yo, Julia' y Premio Planeta 2018

(Premio Planeta 2018)

“Julia Domna, una ganadora borrada de la historia

Texto: J. Víctor Esteban / Blanca Cañamero

Las librerías valencianas deben estar preparándose para las compras navideñas 2018-2019 sacando brillo a las portadas de Yo Julia, la flamante obra con la que su paisano Santiago Posteguillo ha ganado el Premio Planeta 2018. Al igual que las librerías, las tiendas online se preparan para las descargas en EPUB de sus libros sobre el Imperio romano (Trilogía de Escipión el Africano y Trilogía sobre Trajano) y de otras obras de este filólogo, lingüista y doctorado editadas por la Editorial planeta desde que empezara a escribir en 2006.

El resto de las mujeres de la antigüedad tienen siempre comportamientos femeninos porque sus historias las escriben hombres. Son amantes manipuladoras, envenenadoras de rivales políticos, intrigantes de mano de seda, pero Julia es un “animal político” de primer orden de tanta valía o más que su marido y reconocida como tal en un entorno de hombres.

¿Cómo descubrió a este personaje, Julia Domna, tan especial? ¿Cómo la encontró? ¿Con que otras mujeres de la antigüedad o de nuestros días puede compararse?

En el mundo antiguo había otras mujeres importantes. Los hombres que escribieron la historia del mundo antiguo solo nos han dejado que recordemos la historia de Cleopatra, de Zenobia de Palmira (reina del Imperio de Palmira) o de Boudica (reina guerrera de los icenos) que fueron derrotadas. En cambio Julia es una ganadora y desde un punto de vista de teoría de la conspiración podríamos pensar que los hombres no quieren que se sepa que una mujer podía ganar y casi la borran de la historia. Pero en el siglo XX y XXI cuando ya hay historiadoras, como la profesora Barbara Levick de la Universidad de Oxford que escribe una increíble biografía sobre Julia Domna que me leo y me quedo enamorado del personaje.

En esa biografía la profesora Levick comienza afirmando sorprendida que no entendía como no había novelas y películas sobre Julia Domna. Y como yo tampoco lo entendía, no podía hacer una película, pero una novela si.

En sus últimas novelas aparecen más mujeres poderosas que en las anteriores, como la emperatriz china de “La Legión perdida” o la propia Julia.  ¿Cree que la preocupación social por los problemas femeninos le ha influido al elegir este personaje?

No… y si. Yo no vivo al margen de la sociedad y yo creo que como otros muchos hombres de mi generación voy bebiendo del proceso de sensibilización creciente que se da en el mundo occidental hacia una búsqueda de una igualdad entre géneros. Ahora bien la selección de Julia no es algo oportunista en el corto plazo sino que si se examinan mis novelas, de una novela inicial donde apenas hay mujeres relevantes cada vez en el Trilogía de Escipión las mujeres cobran más fuerza, y en la Trilogía de Trajano muchísimo más. Era una evolución natural que en algún momento quisiera que un personaje central fuera una mujer.

Lo que ocurre es que yo empiezo con Yo, Julia hace tres años y el movimiento #metoo que acelera internacionalmente todo esta sensibilización lleva 18 meses. Lo que ha ocurrido es que la aparición del libro ha coincidido con un momento de más sensibilización. Feliz coincidencia, pero nada más.

Lo que si es cierto es que las mujeres disfrutáis especialmente Yo, Julia. Ese puntito de ir por delante de todos para una mujer tiene especial gracias. Cuando los hombres llegan, ella ha ido y ha vuelto tres veces, y eso a las mujeres les gusta.

¿Podemos esperar algún personaje femenino protagonista de primer nivel en sus próximas novelas?

Podemos. Lo que no sé si será en la próxima novela, o en la siguiente. Pero podemos esperarlo porque existen más mujeres relevantes en la historia y muy injustamente desconocidas.

En sus novelas “romanas”, las dos trilogías y Yo, Julia, los protagonistas ejemplifican al “buen servidor público”, Escipión, Aníbal, Trajano, Severo, frente a los políticos ambiciosos, codiciosos o simplemente incompetentes. ¿Cree que la literatura debe proporcionar ejemplos de servicio público a la sociedad y a los propios gobernantes al estilo de Suetonio o Dión Casio?

Puede ser uno de los servicios de la literatura. Yo creo que la literatura debe de promover buenos valores. Aunque eso se puede hacer desde el enfoque positivo y desde el enfoque negativo. Desde el enfoque positivo lo tienes con mis novelas, pero también se puede hacer desde el enfoque negativo, como por ejemplo A sangre fría de Truman Capote.

¿Cree posible compaginar la ambición individual con los intereses del estado o el buen gobernante solo destaca cuando las instituciones son fuertes y no le permiten desbordar su ambición?

Se pueden dar todo tipo de combinaciones. Lo ideal es que las instituciones de los estados sean lo suficientemente fuertes para actuar como contrapeso de poder. Como por ejemplo puede estar ocurriendo hoy en Estados Unidos, donde existen una serie de contrapesos que permiten que el país no se vaya al desastre absoluto. Pero idóneo es que junto a una buenas instituciones pues haya gobernantes que combinen carisma y espíritu de servicio al estado. Es inevitable que una persona que esté en política tenga ambición, pero hay ambiciones negativas y positivas. Lo ideal es que la ambición que es una fuerza motriz no se convierta en el objetivo en sí mismo.

Este es un problema que tenemos en España hoy en día. Hay gobernantes y personas que luchan por el poder que lo único que tienen realmente es ambición y no espíritu de servicio, y eso si es un problema.

¿Qué opina de la pérdida de peso de los estudios clásicos en la enseñanza básica? ¿Debe la enseñanza basarse en enseñar herramientas como Microsoft Office, o nuestros hijos deberían saber más de la “sobrietas” latina y los conceptos básicos?

Yo creo que los curricula de primaria y secundaria no están bien hechos. Lo que no he entendido jamás es por qué mi hija ha estudiado lo mismo en varios cursos, por qué ha estudiado a los romanos una y otra vez. No tiene mucho sentido. Yo creo que si tenemos escolarizados a los niños de los 3 a los 18 años hay tiempo para que tengan formación humanística muy necesaria y toda la formación técnica y tecnológica igualmente necesaria. Siempre he creído que esto no está bien organizado y que repetir contenido un año tras otro es una estupidez.

La república con Escipión, el imperio con Trajano, el gran viraje al este con Severo, ¿Cuál es su próxima aventura romana?

Estoy empezando a valorar si cerrar el paralelismo con Yo, Claudio que tenía una segunda parte titulada Claudio el Dios. Quería ver si Julia iba a interesar lo suficiente, o no. Estamos ahora mismo en la cuarta edición y parece ser que si interesa.

Es usted un magnífico escritor de batallas, Cannas, Zama, el paso del Tigris. Batallas en las que consigue mantener sin aliento al lector sin perder de vista la realidad histórica. La historia de España está repleta de grandes batallas de las que no se habla, ¿Cuál elegiría para escribir una de sus brillantes descripciones?

Lepanto, sin dudarlo. Con Cervantes incluido. Es una batalla impresionante y muy interesante porque hay buenos y malos mandos militares en ambos bandos, tanto en el otomano como en el cristiano. Es muy divertido. Además los otomanos pierden porque el sultán le da más preeminencia a los mandos inútiles frente a los cristianos en el que Felipe II le da más poder al más inteligente.

Si tuviera que elegir algunos libros para que sus lectores pudiéramos acercarnos a la historia de Roma, ¿cuáles recomendaría? 

Desde un punto de vista ensayístico SPQR, una historia de la Antigua Roma de Mary Beard, Javier Negrete también tiene buen material a título divulgativo. Desde el punto de vista novelístico, a parte de releer Roberts Graves, un escritor español muy olvidado, Alejandro Núñez Alonso Premio Nacional de Narrativa, que en los años 60 tiene una serie de títulos sobre los judíos en el mundo romano muy interesantes.

¿A qué personaje del mundo clásico deberían parecerse más nuestros actuales políticos? ¿O sobre cual deberían leer?

Yo me conformaría con que leyeran. Ya puestos a leer algo estaría muy bien que leyeran a Seneca, Julio César, Dion Casio, Herodiano y Plutarco.

¿Qué tipo de literatura lee usted? ¿Puede recomendarnos dos libros que haya leído recientemente?

Leo mucho ensayo relacionado con la documentación de mis novelas, y también novela histórica. Además, leo muchos clásicos de literatura inglesa y americana para las clases que doy en la universidad.

The Joys of Motherhood de Buchi Emecheta una autora nigeriana, es una novela muy dura que refleja los problemas de la mujer. Y otra novela que me leído recientemente de mi amigo Sebastián Roa, Enemigos de Esparta.

¿Tendremos que esperar mucho para su siguiente novela?

Un par de años seguro. Sobre todo con una campaña de promoción tan intensa como la que acompaña a los Premios Planeta.

¿Después de publicar una novela como Yo, Julia no se queda vacío?

No, eso no me pasa porque tengo muchas ideas en la cabeza y ganas de escribirlas. Lo que no voy a tener es tiempo para escribir todo lo que me apetecería escribir.

¿El tiempo que transcurre desde que entrega un libro hasta que se publica le sirve de descanso?

No, el tiempo que pasa desde que yo entrego un original a la editora y comienza a enviarme comentarios y correcciones yo ya estoy preparando la documentación de la siguiente novela. Para mi no es un sacrificio porque me lo paso muy bien escribiendo.

Me da vértigo el pensar que no acierte con la forma de contar una historia, que no conecte como las anteriores. Pero a parte de eso disfruto mucho.