Dispuesto a presentar su nuevo disco titulado Parafernalio junto a su compañero inseparable a los platos DJ Pimp, el canario Bejo llegó a colgar el cartel de sold-out en la sala Apolo de Barcelona pocas horas antes de dar comienzo su directo.
Haciendo la obligada parada de rigor en la zona de merch en la que pudimos adquirir sus dos discos en formato CD y una camiseta estampada con el famoso Dibejo que ha llegado a alcanzar en Ebay la desorbitada cifra de 125.000 euros en pujas, era ya la tercera vez que podíamos disfrutar del desparpajo y el vacile de este peculiar mc sobre las tablas de un escenario.
Un concierto con altibajos
Pues bien, ya fuera porque algunas de las canciones de su nuevo trabajo no acabaron de funcionar del todo en directo, Helarte sin ir más lejos con esos efectos vocales no salió nada bien siendo uno de los tema más originales y diferentes del disco, o por la acusada afonía que sufría Bejo esa noche, todos los temas sonaron un tono por debajo de lo normal por culpa de su afectada garganta, he de decir que de lejos la más floja de las tres.
Obviados los obstáculos que la tecnología y la salud le pusieron por delante a Bejo esa noche de viernes en la Ciudad Condal, podemos decir alto y claro que tanto el canario como DJ Pimp ofrecieron el show más completo, complejo y profesional hasta la fecha poniendo a la sala entera a bailar y cantar como posesos con pepinazos de la talla de Onomeatropella, Una Papa Pal Kilo, ¿Verde Azulado o Azul Verdoso?, El Tupperware, o ese doble bis final protagonizado por sus ya clásicos de sus directos Mango (lanzando dos mangos al público) y Mucho (en la que hizo su ritual habitual de bajar al público y cantarla por toda la sala junto a sus incondicionales).
Otro de sus rituales obligados es el de salir a escena con la cesta de mimbre repleta de caramelos y croissants de chocolate para realizar lanzamientos a discreción sobre el público durante la ejecución de los temas. Un rollo que la gente aprecia de manera especial ya que justo antes de la cena, poder pegarle unos muerdos a unos croissants de chocolate para matar el gusanillo es de agradecer.
Y ademas DJ Pimp
Pero como no solo del mc vive el público, DJ Pimp hizo su personal demostración de sus habilidades con el turntablism de la misma manera que nos ofreció tres canciones seguidas a modo de sesión extraordinaria en medio del concierto en la que se puso tras una batería de verdad y acompañó a Bejo de manera orgánica y directa con una selección de temas que, la verdad sea dicha, no conocía de nada. Me quedé con la duda de si eran temas nuevos o si simplemente eran temas antiguos no incluídos en los discos reciclados de manera diferente para el directo ofreciendo una visión única y sorprendente sobre las tablas.
Buen concierto de un mc y un dj a los que todavía les queda mucho por decir en la escena y que a cada paso que dan, quizás algo más lentos que el resto, suben un peldaño más de manera sólida y concreta.
+ Info: BEJO + DJ PIMP/ 25 enero 2019/ Sala Apolo (Barcelona) / Precio: 13€
