South Summit 2019 reúne a las startups más importantes que ya tienen un pie en el camino del éxito, pero no siempre es así. Si un 70% de las startups de Silicon Valley fracasa, por algo será.
Un pilar fundamental para que una startup tenga éxito, depende de quién orienta a los emprendedores.
En ocasiones, el proyecto carece de orientación comercial, no dispone de un mínimo plan de marketing o necesita aclarar sus cuentas, un análisis financiero, para ver por dónde van los tiros.
La cosa no depende tanto de los inversores sino de quienes ayudan a modelar el proyecto.
Los mentores de la Fundación para el Conocimiento Madri+d ofrecen su know-how en diferentes áreas a la treintena de startups de base tecnológica que se seleccionan en cada edición.
Son estos Pepito Grillo quienes indican cómo adecuar el proyecto para encajar en un mercado y satisfacer inicialmente a los early adopter.
Son los mentores los que hacen ver la necesidad de llegar a una cuota mínima del 15% del mercado y también quienes orientan, finalmente, de que los strong users del servicio o producto de la startup sean todos buyer persona de nichos específicos.
Por mucho que el proyecto haya nacido con otra vocación, la oferta y la demanda mandan, y rompe el corazón crear un producto más simple pero que promete irrumpir con éxito en la vida de sus usuarios.
Y claro, aunque el dinero es como la sangre que circula y mantiene vivo un organismo, una startup necesita financiarse y controlar sus gastos, por lo que siempre deja para el final cómo acercarse al mercado potencial. Y a veces se pivota tarde porque no se han hecho ninguna operación de marketing de forma paralela al desarrollo de producto.
Rosa Panadero, business mentor certificada de la Fundación Madri+d, cuenta sus impresiones sobre cómo algunas herramientas gratuitas de marketing digital ayudan a las startups a posicionar su producto sin necesidad de pagar nada más allá de la conexión wifi del coworking:
