¡Mejores juegos “N”indies para Nintendo Switch!

Nintendo lleva un año lleno de juegazos y muy probablemente hayas decidido pedirle al gordo de rojo o a los tres mágicos orientales tu consola portátil. O puede que ya la tuvieras de antes, y veas con malos ojos la sequía de juegos que tenemos entre manos hasta que lleguen los nuevos anuncios de Nintendo. En ambos casos ¿A qué vas a jugar? Pues estás de suerte por qué desde luego Nintendo ha ido surtiendo de buen gusto su catálogo, pero si no quieres pagar los 60 pavos de rigor que valen cada una de sus superproducciones, o simplemente, ya las tienes y buscas carnaza nueva, bienvenido a este mini reportaje donde te mostraré lo mejor del catálogo Indie que puedes ver en la Eshop de Nintendo. Bueno, bonito y barato, señores… ¡Pasen y vean!

Snipperclips (19,99€)

Este simpático videojuego vino para acompañar a la eshop de Nintendo en su salida, y mientras todos pensaban en Zelda y en lo que saldría a continuación, lo cierto es que se hizo un hueco en el corazón de mucha gente por su estilo desenfado y lo ingeniosos de algunos de sus puzles.

Su eslogan es “recorta en compañía”, y no es para menos teniendo en cuenta de que es un juego pensado para jugar en compañía de algún amigo. Su jugabilidad es realmente simple pero profunda. Llevamos a unos recortes de papel que a su vez, vamos recortándonos entre nosotros para resolver los puzles que el juego nos lanza. Juego rápido, sencillo y barato con el que echar una partida en compañía de un amigo en esas larguísimos viajes en metro, bus o coche.

Thimbleweed Park (19,99€//14,99€ en la oferta de ENERO)

No somos pocos los que escuchamos el nombre de Ron Gilbert y levantamos la mirada al cielo, apretamos el puño con aires épicos mientras imaginamos que alguien toca para nosotros un cañero solo de guitarra. ¡Normal! ¡Hablamos del $€@#€ Ron Gilbert! ¡El creador de obras tan grandiosas como el clásico Monkey Island, el divertidísimo The Cave o el brutalmente legendario Brutal Legend (¡Chistaco redundante!)! Pues Thimbleweed Park es su último videojuego en forma de romance a las aventuras gráficas de los 90 que con un tono pixelado, mucho humor y un nombre impronunciable se ha catapultado como uno de los mejores videojuegos del año.

Llevando a un desarrapado grupo de personajes a cada cual más “freak”, debemos investigar un asesinato y desentrañar, usando nuestro ingenio, el misterio que se oculta en el escabroso pueblo de Thimbleweed Park. No será cosa fácil, os lo aseguro, pero merecerá la pena.

The End Is Nigh (14.99€)

The End is Nigh es uno de esos juegos que amas u odias. Entre otras cosas por qué esta creado por la grotesca mente de Edmun McMillen (Que tiene entre sus creaciones The Binding of Isaac o Super Meat Boy). Si bien visualmente el juego no es tan abrumadoramente dantesco como The Binding of Isaac (Donde llevabas a un bebe que se defendía de sus enemigos con cacas y mocos entre otras cosas), lo cierto es que donde más mala leche ha puesto es en el apartado jugáble. Y no es porque sea muy complejo, en absoluto. De hecho el juego se juega con dos botones prácticamente, si no porque es sumamente exigente en su simpleza. Es un juego de plataformas en el que llevamos a un… ¿Tumor? (No tengo muy claro que co****s es eso) que tiene que pasar por distintas pantallas de saltos milimétricos para conseguir su objetivo, crearse un amiguito a base de trozos de personas.

Cuando digo que el juego es difícil, no es un decir. Para que os hagáis una idea, el mismo juego viene con un contador de muertes en su pantalla de carga, y a los 30 minutos ya tenía más de mil a mi espalda. Es un juego que funciona entre en el ensayo y error y la habilidad y los reflejos más absolutos y pone todo su hincapié en que sus exigentes y crueles mecánicas jugables sean justas… Si la cagas, la cagas tu, no el juego. Si mueres, fue por qué calculaste mal el salto… y es tan absolutamente adictivo y viene tan cargado de secretos que se convierte en una joya que merece la pena… Ahora, hay riesgo de que estrelles la consola contra la pared por la frustración, así que una tilita antes de jugar.

Enter The Gungeon (14,99€)

Si alguien me dijera… “¡Eh! ¡Manu! ¡Describe este juego!” os juro que lo más acertado que se me ocurriría en ese momento sería tirar una mesa y rodar por el suelo mientras voy gritando “BANG BANG BOOOM PLAS BANG BANG”. Fiel a su premisa. Dispárale a todo, ármate mejor y sigue disparando.

El juego nos propone explorar unas mazmorras resolviéndolo todo a tiro limpio en pequeñas “runs” o “partidas” que pueden durar desde 10 minutos a una hora dependiendo de nuestra habilidad, y es que si bien el juego siempre nos obliga a empezar desde el principio, con cada “partida” vamos desbloqueando nuevas armas, objetos y curiosidades que harán que lleguemos más lejos, junto a una curva de aprendizaje tan bien resuelta que es impresionante ver como en nuestra primera partida no pasábamos del primer piso de la mazmorra y en la última nos hacemos las tres primeras sin que nos toquen. La mazmorra sea crea de forma aleatoria (Enemigos, objetos, armas, bosses) para que nunca nos terminemos de hacer con el mapa, y siempre sea una partida nueva.

Juego muy divertido, del género “RogueLike” que viene genial para momentos muertos, en el que cada partida es mundo, y jugarlo en cooperativo es altamente satisfactorio.

Stardew Valley/ (13,99€)

Me considero un Gamer de pura cepa…

He masacrado monstruos por todo Hyrule y viajado por Azeroth comandando a los no muertos… peleado contra los dragones en Skyrim, y acabado con los demonios de Marte en Doom. Los aliens del Covenant tiemblan al escuchar mi nombre y en Umbrella saben que no hay amenaza a la que no le enseñe los dientes… ¡Y qué bien me lo paso recogiendo florecitas, fresitas y ordeñando vaquitas en el Stardew Valley!

No me he vuelto loco. Stardew Valley es un simulador de vida en una granja que es horrorosamente adictivo hasta decir basta. De esos juegos que pruebas por que todo el mundo habla bien de él y esos “quince minutos para ver como son las mecánicas jugables” se convierten en 40 horas sin darte cuenta. El juego tiene unas mecánicas muy simples pero muy bien implementadas y al más puro estilo Harvest Moon nos pedirá que convirtamos un baldío terreno que hemos heredado en una zona de provecho. El juego se juega día a día, estación a estación y año a año. El tiempo transcurre dinámicamente a medida que debemos ir viendo como avanzamos en nuestras prioridades. Agricultura, pesca, ganadería, minería e incluso un combate muy simplón pero efectivo se dan de la mano en este juego, sin olvidar a los simpáticos habitantes del pueblo con los que tendremos que congeniar (o no) a medida que crecemos en el pequeño pueblo de Stardew Valley como un granjero de provecho y vamos descubriendo los miles de secretos y misterios que la zona nos guarda… ¡Mucho cuidado con las brujas!

Estos son unos pocos… y paro aquí para no colapsar la lista, pero os prometo que en breve vendré con más joyitas.