Blog de cine por Agus Scab sobre Overlord

OVERLORD

Nazis, nazis, nazis y ¡boooooom! ¡zombies!…
¡toma ya!

por Agus Scab

Nazis, nazis, nazis. II Guerra Mundial, II Guerra Mundial, II Guerra Mundial. Zombies, zombies, zombies…

Un momento.

¿Zombies?

Era jueves por la mañana y me disponía a echarme una cabezadita mientras veía de fondo o(oooo)tra película sobre la II Guerra Mundial. Tonos pastel, pausas infinitas, planos interminables en trincheras, bunkers y demás lugares que bla bla bla me generan una pereza abominable, estaban a punto de torturarme.

Llegué a la sede de Paramount después de haber desayunado una tarta de manzana.

Me senté en la butaca y…

In your face Agus Scab! La venganza definitiva de Oscar Wilde acababa de llegar a la ciudad. Trágate tus pensamientos, si es que puedes, y agárrate a la silla, porque ‘’Overlord’’…

NO ES UNA PELI DE NAZIS.

BOOOM!

Un ritmo frenético que te atrapa desde el primer momento, giros en la historia casi constantes y personajes que son ensalzados al Olimpo para, minutos después, (ZAS!) reventarlos como un saco de porcelana contra el infierno, y viceversa.

Amar u odiar. Esa es la cuestión. Una película que a las mentes más inquietas les hará preguntarse de qué lado quieren estar. Avery y Abrams lo han conseguido, han roto con los moldes de lo bueno y lo malo, y con esa sucia manía de otros directores pretenciosos (aún no los voy a nombrar, hoy no quiero hacer muchos enemigos, que es viernes) que se creen con el derecho de decirle al espectador de qué lado tiene que estar. ¡NO!

Me parece fantástico que ‘’Overlord’’ juegue con la inteligencia de la persona que está viendo la película y te permita internamente preguntarte: ‘’¡Joder! ¿Esto que estoy pensando está bien o soy un monstruo?’’.

Película candidata a Oscar, como poco, por la cara dura con la que enfrenta los 108 minutos que tiene por delante.

Una película que trata sobre la moral con pequeñas dosis de terror. Situaciones extremas subrayadas con pinceladas de gore y una historia que no creo que diste mucho de la realidad (llamadme loco si queréis, pero como después de verla me vengáis a decir que es una película de nazis o de zombies, simplemente, os tendré que dedicar otro artículo vomitando toda mi bilis contra vosotros/as y rebozárosla por la cara mientras grito ‘’¡¿QUIÉN ES EL NAZI AHORA?!’’).

No. En serio.

Película más que recomendable que se ha ganado el sello de aprobación ‘’Scab’’ (me lo acabo de inventar, pero mola, ¿no?).

P.D.: Si alguien al verla piensa también que es una alegoría al auge de los extremismos en nuestra sociedad actual y cómo sus ideas radicales se están haciendo fuertes ‘’en un sótano camuflado de progreso’’, por favor, que me escriba al mail de contacto de esta revista, porque esa persona es mi media naranja.