Entretenida, divertida
y con mensaje
Charo Sardina
Dani es un escritor frustrado de 35 años que mientras espera que se le ocurra un buen argumento para su primera novela, sobrevive haciendo biografías por encargo.
El protagonista de esta comedia odia todo lo que sean historias de amor, vive en un piso miserable de un sueldo miserable, en una existencia sin ningún encanto, pero que él describe a golpe de chiste. Se siente culpable de una vida de la que no es dueño y de unas cuantas relaciones que nunca llegaron a buen puerto… Su única ilusión se llama Eva, la hija de uno de sus protagonistas de las biografías con la que se gana la vida, y que entre besos y broncas va configurando la que será esa su historia de amor que él tanto odia.
Este es el eje central de Esto no es una historia de amor, de José A. Pérez Ledo, guionista, humorista y director de televisión que, en clave de humor, nos retrata las vicisitudes de la vida de este joven periodista. José A. Pérez Ledo se deja llevar por su facilidad para divertir y pone en boca de nuestro personaje una sabiduría muy especial, que tiñe de cómica cualquier vicisitud de la vida que de otra manera bien podría hacernos llorar.
La vida de Dani da un poco de pena, la verdad. Parece un chico algo amargado y un poco incomprendido que cree que puede aspirar a más, pero que no sabe por dónde salir. Esta novela, entretenida y que te arranca sonrisas desde las primeras líneas, no deja de retratar muchos estereotipos de los jóvenes y no tan jóvenes de hoy, víctimas de los tiempos que vivimos y que ven pasar la vida a su alrededor sin que suceda nada destacado y sin que se les ocurra qué hacer para remediarlo. Y Dani es un buen ejemplo de ello, con unos padres convencionales que no hacen más que discutir, con una colección de novias que han pasado por su vida con más pena que gloria.
Esto no es una historia de amor es una novela entretenida, por supuesto con final feliz que, además, te hará reflexionar sobre este mundo en el que vivimos, un mundo de relaciones complicadas y sueños rotos, o a punto de romperse, por la realidad que nos envuelve.
Desde el primer momento, la novela arranca sonrisas a su lector y engancha porque está bien hilada, porque tiene chispa, porque a nuestro protagonista se le dan bien las frases chistosas. Está narrada en primera persona y dirigida al lector, a quién se le mete en la historia de vez en cuando dirigiéndose a él y haciéndole cómplice de sus rutinas. Es creativa e ingeniosa y nada superficial cuando describe con bastante acierto la vida anodina, las ‘comeduras de coco’ y las inseguridades de nuestro protagonista que, desde luego, bien podían ser ‘la vida anodina, las comeduras de coco y las inseguridades’ de cualquier lector, y en la que preguntas tan antiguas como esa de ‘¿qué sentido tiene la vida?, que el propio Dani se hace más de una vez, toman bastante cuerpo. Una pregunta que al fin nuestro protagonista logra medio responder en la última línea. Pues, a mí eso ya me vale.
Si quieres leer el primer capítulo pincha aquí. Esto no es una historia de amor.
