El nuevo libro de Alejandro G. Calvo o cuando el cine se entiende como «la continuación de la vida»

Fue Jean-Claude Carrière quien dijo primero eso de: «la imagen filmada es la única victoria que tenemos sobre la muerte», pero ha sido el periodista y crítico Alejandro G. Calvo quien nos ha ayudado a entenderlo con el lanzamiento de su libro Una película para cada año de tu vida

Publicado por el sello Temas de Hoy, de Planeta, este libro escrito por y para el corazón de los cinéfilos busca ayudarnos a encontrar el filme ideal para cada momento de nuestra vida. Lo hace con 100 recomendaciones, una para cada año que vivamos, -tal vez un número algo optimista, pero que en la lectura, sin duda, se queda corto-.

El humano es un animal cinéfilo

A lo largo de la vida, las personas disfrutamos, de media, de más de cinco mil películas. Nos emocionamos con historias y personajes que hacen un clic en nuestro interior que no sabemos explicar. ¿Y si alguien pudiera ayudarnos a entender por qué el cine se ha vuelto imprescindible para el ser humano? (Sinopsis oficial)

Y es que, libros de cine hay muchos, y listas de películas aún más, pero libros sobre nuestra vida a través del cine… No tantos. Esto es lo que hace especial esta desnudez del alma de Alejandro G. Calvo, el cómo un crítico de los que sonríen busca encajar cien películas que considera especiales para ayudarnos a que nos gusten como le gustaron a él. Y para eso, a veces, es mejor verlas en el momento indicado. ¿Qué sentido tendría ver La Lego Película con 40 años, o Taxi Driver con 9. Yo no podría concebir mi vida igual, si no hubiera tenido la suerte de haberme criado viendo El Rey León, ha sido demasiado importante en cómo percibo e interpreto el mundo.

El cine es la continuación de la vida, y la vida es la continuación del cine. Gracias a uno tenemos al otro. No me imagino una vida sin cine, pero mucho menos un cine sin vida. De hecho el libro viene a decir también que para entender el cine, hay que vivir primero. Para emocionarnos con la imagen de un padre y un hijo, mejor aún será ser padre, e hijo. Para sufrir el dolor de una historia de amor, habrá que haber vivido al menos una… El cine, como diría Godard, es realidad a 24 fotogramas por segundo.

Naces, creces, te reproduces y… ves cine

E incluso, a veces, las dos últimas las haces juntas. Vivamos.

Hazte con un ejemplar del libro aquí

¡Ya disponible en librerías!