WOKE de Titania MacGrath

Reflexiones desde mi espejo

Blog de Opinión

Manuel Gris

‘WOKE’, la verdad por una feminista

WOKE es un libro escrito por Titania McGrath, o lo que es lo mismo,  Andrew Doyle: un comediante, escritor y periodista satírico británico, que mediante la sátira y tomando como ejemplos las desquiciadas argumentaciones de muchas “feministas” de nuestros tiempos, hace una radiografía perfecta de la mente de los iluminados autoproclamados “Defensores de la moral”.

¿Pero y si Titania fuese real… y yo un futuro Woke?, pues digamos que la Reseña sería tal que así:

 

Gracias a Titania y su WOKE he abierto los ojos.

Os pido perdón a todEs, hermanEs feministas: yo estaba ciego, y ahora veo.

Su primer libro, titulado con la palabra que define lo que todos deberíamos ser: WOKE (publicado por Alianza Editorial), es un canto al mundo pidiéndole que despierte de su letargo y, de una vez por todas, comprenda todo lo que hace que personas como Titania sean referentes culturales y las monumentales luchadoras por la política social que nos merecemos como sociedad.

Que los liberarán como individuos.

Perdón… como individuos e individuas.

Con una seguridad e inteligencia envidiables, características de todas las que en las manifestaciones del 8M llevan el megáfono y separan a las mujeres entre racializadas y no racializadas (porque no nos engañemos, hay mujeres de primera y de segunda desde que el mundo es mundo, y unas merecen más lucha y atención que otras), esta fascinante escritora nos muestra el modo correcto de afrontar todos los problemas que nuestra sociedad occidental (que por definición es la más machista y retrógrada del planeta) tiene a la hora de afrontar los problemas fundamentales que, por haberlos abandonado a lo largo de los años, han colocado a las mujeres bajo un techo de cristal que nada tiene que ver con sus elecciones personales, y con un manto asfixiante que las sitúa bajo una brecha salarial que no necesita argumentos para ser defendido, porque de todos es sabido que si algo sientes que existe es sinónimo de que así es. Y ya está; no seas machista.

Desde el modo en que debemos afrontar la pobreza (y que todo el mundo sabe que se conseguirá erradicar a base de canticos y slams de poesía improvisada), pasando por el problema de la islamofobia (luchar contra el hiyab es sinónimo de fascismo), lo totalmente incapaces e inútiles que somos los hombres (cuyo nacimiento es ya sinónimo de violación, pues estuvimos dentro de nuestras madres sin su consentimiento explícito), y sin olvidarnos de lo necesaria que es la censura para poder vivir en un mundo libre dentro de lo bienintencionado y lejos de los que no dicen cosas positivas sobre los demás, Titania ha conseguido que cada página entrara en mi mente y destruyera parte de este alma de machista que poseo sin yo saberlo, que poseo innatamente, y me ha acercado a un mundo que, reconozcámoslo, huele un poco a la derecha más rancia y trasnochada de nuestra historia pasada, pero que desde su prisma es algo tan bienintencionado y bueno que me estoy plateando, entre otras muchas cosas, mi inclinación sexual y el pronombre con el que quiero que se dirijan a mí.

Y es que la heterosexualidad es una enfermedad que solo tiene como finalidad llevar a la raza humana a la extinción; palabra de Titania McGrath. 

Así que si necesitáis abrir los ojos (y si no es así allá tú; si quieres ser lapidado en redes sociales o tachado de nazi y misógino, como digo, allá tú), si te has cansado del mundo enfermo y lleno de cadenas invisibles que hacen que por el simple hecho de no ser un hombre blanco heterosexual (el diablo) tus derechos no existan, este es tu libro. Esta es tu autora. Este es el pequeño rectángulo sobre el que deben girar todos los pasos de tu miserable y estúpida existencia.

Porque Titania McGrath es la respuesta de la inteligencia sobre la idiotez, del raciocinio sobre el sectarismo, y leerla es, a pesar de todos los verdaderos problemas que nos rodean, tan necesario como importante para que las cosas vuelvan a ser normales.

Porque todo es un gran chiste, uno demasiado largo y cansado, pero que solo está en nuestra mano el ponerle un punto y final.

¿Dejaremos que Titania se lo ponga?, yo creo que sí.