No lo pienses. No lo digas. Bye Bye Men

 

Hola y bienvenidos a villacliché, donde las luces no existen y siempre se olvidan de encender las pocas que hay, donde los protagonistas son universitarios y curiosamente el personaje principal es medio monguer y nadie se explica cómo esta con esa chica rubia monumental; todo eso sin contar que su mejor amigo es de color y está más fuerte que el vinagre. Como elemento estrella del elenco de clichés de “terror”, súmale el uso de la música que de repente empieza a bajar el volumen y sube bruscamente intentando asustarte sin nada que lo haga.

Queridos Yellowbreakers, ¿Estos elementos no os recuerdan a nada? ‘Scream’, ‘Se lo que hicisteis el último verano’, ‘Halloween’, ‘Viernes 13’, ‘Leyenda Urbana’… ¡Anda que coincidencia, todas son prácticamente iguales! Lejos de criticar el género slasher, del cual soy bastante fanático, tengo que decir que este tipo de películas andan por la cuerda floja de caer en lo de siempre, en otras palabras, es difícil apostar por este género.

Con Bye Bye Men se aborda una gran idea, un pensamiento mortal que se expande cual virus. Así, a priori, aunque manido tema, tiene un parecer atractivo… ¡ERROR! Atractivamente mal ejecutada la idea, la película avanza anodinamente sin ton ni son; ni medio giro argumental sorprendente y desde los créditos iniciales ya sabes cómo termina, todo muy previsible.

Aunque no quiero ser un dictador de la crítica, voy a resaltar cosas que me gustaron, es decir nada, que noooo, si que hay algo. Personalmente me flipó la estética del demonio y la manera en que interactúa con sus víctimas; también me gustó mucho la banda sonora, que a pesar de no salir de los ritmos clásicos de este género concede momentos de tensión y leve suspense.

En mi opinión queridos Yellowbreakers, esta película va a pasar sin pena ni gloria, para variar una nueva inversión de la superproductora de cine americana, cumpliendo sus cuotas de producción, pero sin encontrar calidad, en fin, cine muerto a la cantidad.

Así nos va.

@CumonDice