Halloween, algo mas que disfraces y calabazas

Halloween pumpkin

La fiesta de Halloween se ha instalado en España ya hace varios años y las brujas y muertos vivientes ‘llegan desde el inframundo’ cuando la noche del 31 de octubre comienza a caer… Al menos en formas de disfraces, afortunadamente. Esta conmemoración milenaria de origen celta y no americano, como se cree, no se origina como celebración de algo ‘terrorífico’ sino como fiesta para ahuyentar a los espíritus malignos.

Las raíces del Halloween moderno están en la fiesta pagana del Samhain, en la que se celebraba el fin de las cosechas y el comienzo de la estación ‘oscura’ . Los antiguos celtas, hace más de 3.000 años, creían que con la llegada del Samhaim la distancia hacia el inframundo se acortaba permitiendo a los espíritus acercarse al nuestro. Por ello, invocaba a sus familiares muertos y se vestían apropiadamente para alejar a los malignos.

En el siglo III, la fiesta de las brujas llegó al cristianismo con el emperador romano Constantino que convirtió a su imperio a la religión de Cristo. Así, el Samhain tomó el nombre de Fiesta de Todos los Santos.  El término Halloween es la contracción de All Hallows’ Eve, Víspera de Todos los Santos, en inglés.

Junto a brujas y muertos vivientes, otra gran protagonista de Halloween es la calabaza. Su historia tiene el origen en los inmigrantes irlandeses de Estados Unidos a finales del siglo XIX, que la introdujeron en la fiesta en homenaje a ‘Jack, el de la linterna’. ‘Jack of the Lantern’ o ‘Jack-o’-Lantern’ es una leyenda en la que un granjero ladrón engaña al Diablo para que no se lleve su alma y éste le castiga con vagar sin rumbo por la eternidad. Para ello le regala una estaca prendida en fuego que Jack coloca en un nabo hueco. La llegada de la calabaza a la historia tiene que ver con la abundancia de esta hortaliza en Estados Unidos en aquella época cuando los emigrantes irlandeses comienzan a difundir la cultura de Halloween por el territorio americano.

Esta historia entronca con la de Truco o Trato. Según la leyenda, el espíritu del granjero Jack iba de pueblo y pueblo pidiendo un trato; quien no lo hiciera se vería castigado con un truco o susto que consistía en maldecir su casa. Para evitarlo, los habitantes de los pueblos colocaban una calabaza hueca y recortada con una vela en su interior y así ahuyentar a dicho espíritu. Otra leyenda, coloca la tradición del Truco o Trato en el Día de los Difuntos, el 2 de noviembre, en el que los primeros cristianos viajaban por los pueblos pidiendo dulces para liberar las almas de los muertos del purgatorio.

Esta costumbre del Truco o Trato se difundió en Estados Unidos para contrarrestar las malas prácticas que se asociaban a la noche de Halloween en la que los saqueos y actos vandálicos se sucedían por doquier con maltrato de animales y también de personas, como los protagonizados por el Ku Klux Klan en los años 20.

Así, se ideó una forma de fiesta más divertida sobre todo para los más pequeños. Y así, el Truco o Trato se convirtió en Susto o Dulce, una actividad que los niños hacen en la noche de Halloween paseando de casa en casa pidiendo dulces.

¿Qué hacer en Halloween?

Y, ahora que ya sabes algo más sobre la fiesta de Halloween te damos algunas pistas para que pases una noche ‘terrorífica’, eso sí, siempre con disfraz.

Si ya eres muy mayor para el Truco o Trato, planes no te van a faltar ya que la oferta para la mejor fiesta es muy amplia. Para empezar, los parques temáticos  Parque de Atracciones, Parque Warner, Port Aventura – no renuncian a organizar una noche terrorífica con eventos especiales para la ocasión. También en Faunia se han preparado fiestas de miedo, en este caso para los más pequeños.

Pero si prefieres algo menos ‘movido’ puedes reservar una noche en un hotel que incluya el ‘packs’ especial Halloween o cenar en un restaurante en el que el bloody cocktail sea la bebida especial de la velada.  Hay fiestas ‘halloweenas’ en todo tipo de salas, desde bailes de disfraces a conciertos, pasando por concursos, proyecciones de películas, relatos de miedo… O, si no, atrévete y organiza en tu casa un maratón de cine de terror. Tus amigos no lo olvidarán.