Duki saca en Madrid el mejor vino de su reserva

El joven argentino consiguió colgar el cartel de sold out  dos días consecutivos en el Wizink Center, proclamándose así, como uno de los reyes de la música urbana internacional. Barcelona será su próximo destino con dos fechas en el Palau Sant Jordi en las que han volado las entradas.

35.000 personas en un mismo fin de semana, a diez mil kilómetros de su casa, “empezamos cantando para 30 personas y ahora te llenamos el estadio” cantaba a capella Duki con los flashes apuntándole. Quién se lo iba a decir a Mauro Ezequiel Lombardo, más conocido como Duki, cuando en 2018 actuaba en la mítica sala But de Madrid ante menos de mil espectadores.

Una pequeña banda de músicos acompañaba al artista, acomodando todas las canciones para que no hiciera falta ningún sonido externo ni un dj, porque sí, que gusto da escuchar un concierto con instrumentos de por medio y cuánto se echa de menos muchas veces en conciertos de estas características.

En cuanto a su estilo musical la palabra que mejor le describe es variedad. Lo más fácil es decir que Duki es rapero, quizá por sus comienzos en las calles de Buenos Aires, pero también es considerado uno de los primeros traperos y para muchos sigue siendo el lider de este nuevo estilo musical que él mismo puso en el mapa. Además, su última etapa ha estado marcada por el reggaetón, sacando dos discos en los que no engaña con su nombre, Temporada de Reggaetón (1 y 2), o participando en YHLQMDLG, el disco mas exitoso de la carrera de Bad BunnyLo único que tenemos claro, es que como él cantaba mientras las columnas de fuego salían del escenario del antiguo Palacio de los Deportes, es un rockstar.

 

Compañía sobre el escenario no faltó. Primero el rapero Dano, nacido en el mismo barrio que Duki (Almagro, Buenos Aires) pero madrileño de adopción.  Dano está Considerado uno de los padres de la  disciplina y es el ídolo de Duki, como él mismo ha confesado en varias ocasiones. Estrenó su nuevo disco el mes pasado que incluye una colaboración con el protagonista de la noche, Santo Grial. El escenario del Wizink Center fue la ocasión perfecta para que la dupla cantará la canción por primera vez, “como que LeBron te saque a jugar cuando estabas en la grada sentado” ,rapeaba Duki, que siempre ha mostrado un enorme respeto por uno de los mayores OG’s del hiphop en habla hispana.

Pero todo el público esperaba a un invitado, a Quevedo. El canario ha tenido un año de explosión estratosférica y esta en su momento más dulce tras el estreno de su primer disco. Una de las características que siempre han acompañado a Duki a lo largo de su carrera es que no le importa colaborar con artistas pequeños. Así lo demostró con Si Quieren Frontear, colaborando con Quevedo cuando este solo tenía una canción conocida. Comenzaba a sonar la melodía del tema y todavía no había noticias del canario, se podían ver caras de decepción en el público al pensar que no iba a aparecer, pero sin presentación ni explicación alguna apareció corriendo desde la parte trasera del escenario,generando uno de los mayores gritos de la noche. El Wizink Center ovacionaba a dos de los mayores exponentes de la música joven, que miraban a la grada con cara de no acabar creerse lo que estaban viviendo.

Y la noche terminó de la mejor manera posible, con las dos canciones que el publico pedía desde el principio, She don’t give a fo y Givenchy. Banderas de Argentina llenaban la pista haciendo que Duki se sintiera como en casa. Las últimas dos canciones, las últimas fuerzas de cada garganta. Imposible mirar a alguien y no verle dejándose las últimas gotas de energía saltando y gritando, sintiendo cada una de las frases. Quién le iba a decir antes de actuar en la sala But de Madrid que cinco años más tarde estaría llenando dos fechas el Wizink Center, aunque en el fondo, siempre supimos que iba a tener un futuro brillante, él mismo lo sabía.

 

Fotografías: Santiago de la Peña