Reflexiones desde mi espejo

Blog de Opinión

Manuel Gris

“Encuentro la verdad mintiendo sobre ella” Tom Spanbauer

“Encuentro la verdad mintiendo sobre ella”

Tom Spanbauer

 

Se acerca Navidad y, sí, este artículo va de un regalo que te voy a hacer:

LEE A TOM SPANBAUER, (si no lo has hecho ya, claro)

Y ya está.

Hasta el año que viene.

 

Ah, vale, que no eres de esas personas que se tragan una orden así como así, de esos que como alguien te dice que hagas algo simplemente lo haces sin tener criterio propio y sin, por ejemplo, preguntar Por Qué; ni te imaginas lo que me alegro. Temía que fueras parte de esa gran mayoría que lee, ve, oye y piensa lo que le dictan los demás sin usar sus propias neuronas.

Me alegro por ti.

¿Por dónde empezar?

En primer lugar tendrías que leerle porque hay muy pocos escritores que con palabras simples, llanas, directas, te lleven de un modo tan bello y limpio por la historia que sea, porque no importa de qué hable, es un auténtico placer agarrarle de la mano y dejarte guiar por la vida de los protagonistas. Podría contar con los dedos de ambas manos los autores que, en mi opinión, son capaces de hacer algo así: Palahniuk, Foster Wallace (sí, ese), Gaiman, Bukowski, Coupland, Brooks (hijo), Hempel, y, por supuesto, uno de los primeros y más mágicos: Spanbauer.

En esta época que nos ha tocado vivir, en la que hay más escritores que lectores, en la que no hay respeto por la forma de contar historias, en la que se alaban las quilométricas o rocambolescas palabras y los hechos redundantes en lugar del arte de contarlas como debería hacerse, es necesario sentarse un segundo y descubrir a alguien que lleva más tiempo que muchos de nosotros jugando con la escritura de un modo tan anárquico y libre, tan fuera de todas las reglas que rigen los best-sellers al uso, que todavía me cuesta entender como sus obras no son de lectura obligada, en lugar de clásicos sin alma o nuevos autores copias de otra copia de aquella copia (también etiquetados como El Nuevo____ )

Como muestra, os adjunto el enlace de Victor Selles, en el que toma las palabras de Chuck Palahniuk (uno de los alumnos más conocidos del taller de Escritura Peligrosa que en Oregón imparte Spanbauer), para que entendáis y podáis en casa jugar como él.

Porque no nos engañemos, escribir, igual que cualquier otra expresión artística, es un juego, algo que debería hacerse porque nos gusta y disfrutamos al verla nacer en nosotros o en los demás, sin peleas, luchas, competiciones, ni nada que sirva para convertirla en un Yo la tengo más larga y grande que tú, que es a lo que juegan muchos que no saben vivir sin pisar o empujar a los demás (suerte con vuestra patética existencia, por cierto). La escritura debería ser algo que nos anime a levantarnos y descubrir nuevas historias y métodos de expresión, algo que nos ilumine y nos aleje de verdad de un mundo tan asquerosamente manipulado, y no un arma arrojadiza que nos coloque por encima de alguien.

Por eso debéis leer a Tom Spanbauer, porque su manera de ver las letras, su forma de darles vida, es lo que debería ser el mundo editorial. Después siempre podréis volver con las novelas cortas que entretiene (igual que puede hacerlo, por ejemplo, rascarse el culo), o las nuevas promesas/clones de escritores famosos/superventas, pero antes, estas Navidades, leedle. Creedle.

Y, después, hablamos.