‘Lo nunca visto’

‘Lo nunca visto’

La España vaciada en clave de comedia

Carmen Machi, Pepón Nieto, Jon Kortajerena y Paco Tous se ponen en la piel de aldeanos de montaña que intentan salvar su pueblo de la despoblación. ¿Tendrá África la respuesta a sus ruegos?

por Rosa Panadero

Lo único que justifica los topicazos es la ignorancia, así que la cinta va de comedia y risa fácil, pero de topicazos que manosean el sonrojo como si fuera una diversión.

Siempre alegra ver a Carmen Machi por el espíritu emprendedor en todos sus personajes, y por entorno montañero algo resuena su papel de viuda de la Benemérita en Ocho Apellidos Vascos. Digamos que personifica a la perfección a esa vecina activa, esa presidenta de la asociación de vecinos o jefa de facto en el AMPA del colegio, alguien para quien el bien común es más importante que el cortoplacismo de los políticos, y que además se adapta a los cambios a la velocidad del rayo.

La pega principal del guion radica en que, culturalmente, presentar africanos con plumas corriendo por la nieve está fuera de lugar en el ambiente políticamente correcto del 2019, pero diez o veinte años antes habría tenido más taquilla que Santiago Segura.

Es simpático explorar las vidas de personajes rurales aislados de la civilización, con sus agujas de ganchillo y sus dulces populares, para desconectar del asfalto que nos espera a la salida del cine, y darse cuenta de que posiblemente ellos tengan una misión —salvar su pueblo— en la vida más clara y notable que nosotros —currar, ganar pasta, currar, ganar pasta—.

Las escenas chocantes y esperpénticas son, desgraciadamente, previsibles, y nada de poner los nervios en el estómago porque el nudo de la acción central no dé paso a la solución antes de que la pantalla diga FIN.

La reflexión sobre la España vaciada y qué hacer para volver a llenarla, que no sea con pantanos de los años cincuenta ni con inmigración descontrolada que salva a las mafias de tráfico humano explotando la fibra sensible de la gente, es harina de otro costal cuyo peso medirán los políticos que, cómo no, también tienen sus quince segundos de gloria “Warhol” en la película.

¿Recomendable? Claro. A fin de cuentas es divertida, ¿no?