Ruth Armas, mucho más que una simple actriz

Ruth Armas (Gáldar, Gran Canaria, 1980) rebosa alegría por los cuatro costados. Y es que no le pueden ir mejor las cosas profesionalmente hablando. El mes pasado tuvo la oportunidad de acudir al Festival de Cannes. No es la primera vez que la actriz canaria visita dicho evento, aunque sí la más especial. En 2015 acudió para promocionar el Festival de Cine de Gáldar del que es directora. Sin embargo, en esta ocasión ha sido diferente. “Nunca había venido como actriz. Entonces prometí que la próxima vez que viniera a Cannes sería con una peli”.

Dicho y hecho. Ruth Armas volvió a Cannes para presentar Canción sin nombre, una coproducción entre Perú y España, que narra la historia de Georgina, una joven indígena a la que unos traficantes de niños le arrebatan a su bebé. Ruth interpreta a la secretaria de un periodista encargado de destapar el caso. La oportunidad le llegó como caída del cielo. “Ya había trabajado con el equipo en La isla del viento. En este caso, el tema del acento era importante. La directora me hizo una prueba por Skype y resulté elegida”. Ruth reconoce además que haber estado en Cannes ya es un triunfo para ella.

27 minutos, un corto muy intenso

Pero no acaba aquí la cosa. La actriz canaria acaba de estrenar recientemente el corto 27 minutos, que narra el brutal asesinato por parte de la banda terrorista ETA de los conocidos como amantes de Cádiz. Ha sido una experiencia que la intérprete califica como durísima. “Tengo una interpretación muy complicada y dura en cuanto a emoción, rapidez y entendimiento de la misma porque se hizo en una toma, en un plano secuencia. Pero gracias al director y al trabajo de emoción e imaginación, ha quedado como él lo tenía en su cabeza”.

Canción sin nombre y 27 minutos son el último escalón de una larga carrera que comenzó hace más de una década. Los gritones, un corto de apenas un minuto de duración, fue su carta de presentación. Después llegaron pequeños papeles en televisión (Hospital Central, R.I.S científica y Todos a cien) y películas como El mal ajeno, Naufragio o Casting.

Inasequible al desaliento

Sin embargo, el camino no ha sido nada sencillo. Ruth ha estado a punto de dejarlo todo en más de una ocasión, pero gracias a su simpatía, talento y una belleza que traspasa la barrera de lo físico, esta joven canaria ha conseguido conquistar a la cámara y al público hasta convertirse en habitual del cortometraje en España. “He estado a punto de tirar la toalla varias veces. Pero solo ese día, al día siguiente me miraba al espejo y pensaba: “¡a luchar guapa que nadie te dijo que fuese fácil!” Creo en mí, si no… no seguiría insistiendo”.

Su perseverancia ha merecido la pena y ahora solo piensa en disfrutar cada vez que se pone delante de una cámara. “Me siento a gusto interpretando todo tipo de personajes. Unos duelen más y otros son divertidos. Pero todos son satisfactorios”. Lo importante es que el guión sea apetecible. “No siempre se rueda en las mejores condiciones y hay que hacer un esfuerzo. Así que, por lo menos estar a gusto lo más a gusto posible con lo que haces para disfrutar”, indica.

Valiente y emprendedora

Pero Ruth Armas es mucho más que una simple actriz. Es una mujer valiente y emprendedora que, en plena crisis económica, decidió apostar fuerte por la cultura. “Un país sin cultura no avanza. Sin trabajo menos. Pero con pesimismo y anteponiendo en cada frase que hacemos y decimos “es que la crisis…” el país terminará por morir. No podemos contagiarnos de esto”. Por eso, en el año 2013 decidió crear un festival de cine en su localidad natal, Gáldar, algo de lo que se siente muy orgullosa. “La mayor satisfacción que me he ha dado es que pudo salir de mi cabeza, de mis inquietudes y está ahí para que el mundo lo disfrute como yo lo hago todos los años”.

El Festival acogerá en otoño su séptima edición que estará dedicada a los héroes. “Soy fan de Batman y con ese pretexto, el tema este año trata sobre todas esas personas, con capa o sin capa, que superan cualquier situación compleja. Es un reconocimiento a los valientes”. Esta nueva entrega del Festival promete y mucho. “Estamos dando forma a lo que puede ser una edición legendaria”, señala.

Como amante de la cultura y de todo lo que tiene que ver con nuestro país, Ruth se muestra orgullosa de que Antonio Banderas se alzara con la Palma de Oro en el festival de Cannes como mejor actor. “No tuve la oportunidad de ver la película en Cannes, pero me parece que ya estaban tardando en dársela. Y ¡qué bien que sea con Almodóvar!”.

Y sobre el #MeToo

Respecto al tema del machismo y los abusos en el mundo del cine, Ruth se muestra tajante. “Supongo que en todos los ámbitos hay machismo. A mí me han dado muchas facilidades en Canarias, como directora, actriz y mujer que soy. La cuestión es madurar, que te tomen en serio y que haya igualdad”.

A pesar del buen momento por el que atraviesa, Ruth tiene un lema, “carpe diem”,que cumple a rajatabla. “Prefiero no pensar en el futuro porque me agobio. Vivo el presente y sueño todos los días con poder hacer lo que me gusta y sonreír”, concluye.