¿Y es que qué sería de nosotros sin la memoria o el conocimiento?

Os voy a dar un par de minutos para que los obtusos me insulten, que me llamen todas esas cosas que ninguno de ellos sabe definir pero que está bien visto señalar a alguien como tal a la hora de silenciar a cualquiera que no promulgue o consuma los libros, películas, noticias o reporteros aceptados socialmente.

Allá van.

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Bien, ahora que solo quedamos aquellos que tienen cierta curiosidad por esta increíble obra y que, ante todo, saben entender que el pasado está ahí para conocerlo, estudiarlo o aprender siempre de él, y no para usarlo como arma tras mezclarlo con mentiras o tergiversaciones varias, sed bienvenidos a la reseña de una obra que solo por el título me lleno de curiosidad. Que coño, ¡necesitaba leerla!

La Segunda Guerra Mundial, y en especial el nazismo, siempre me han interesado más allá de ideologías o las victorias.

Para mí lo que de verdad nos enseñó a la humanidad fue hasta donde es capaz de llegar el ser humano, en especial los nazis, gracias a una propaganda bien escrita y muchísimo mejor lanzada, porque para que personas tan valientes y fuertes como las que describe Jesús Hernández en este libro aceptasen las palabras de alguien tan loco y enfermo, tan malvado y lleno de odio, como Hitler es, incluso a día de hoy, un gran enigma para mucha gente; entre las que me incluyo.

¿Qué lleva a alguien a aceptar algo dañino para el mundo como bueno y digno de lucha?, ¿cómo puede la superioridad moral arrastrar a tantos y tantos jóvenes, y no tan jóvenes, a matar y morir por un líder trastornado cubierto de mentiras y de desprecio por los que no son como él? ¿Acaso es posible que vuelva a pasar?, ¿ya ha pasado?

Estas son preguntas que siempre me he hecho y que, por desgracia y visto lo visto, sigo haciéndome, y en este libro he podido encontrar a 10 personas que realizaron actos de verdadero valor, llenos de acción que os costarán creer, y que os pondríais de pie en un cine para aplaudirles tras verlo si no fuera porque lo hicieron por una causa exenta de lógica y llena de muerte y miseria, como es el nazismo.

Los 10 seres humanos que descubriréis de la mano de Jesús Hernández van a hacer que vuestra mente se vea metida en una encrucijada, pues seréis conscientes en todo momento que los motivos que les impulsaban a hacer eso eran malvados, pero al mismo tiempo, como dice el autor en la introducción, ellos fueron también víctimas de la guerra en la que combatieron de forma tan destacada, pagando con el ostracismo su compromiso con la causa del Tercer Reich.

Y es que, como en todas las guerras, en ambos bandos hay el mismo número de victimas como de héroes, sin importar qué les movía o por qué, y eso, nos guste o no, es la pura verdad.

Sé la censura que podéis llevaros con solo decir que os apetece leer esta obra (a mi por colgar una foto de la portada en redes sociales poco menos que me dibujaron en la frente una esvástica como hacía Brad Pitt en la película Malditos Bastardos de Tarantino), pero no dejéis que eso pase.

Tener curiosidad por el pasado, incluso por los peores protagonistas o actos del mismo, es solo poseer el cerebro encendido y apartado de los eslóganes y dogmas que la mayoría de iletrados usan para que no nos salgamos del rebaño.

Lo más divertido de esto es que suelen abanderar estas prácticas, es decir mirar mal este libro, los mismo que aplauden a un gay con el Che tatuado en el brazo, que leen una biografía de Lenin comprada en el Fnac, que tienen una chapa de Stalin en su traje de marca alemana, o una camiseta de Karl Marx en su armario de Ikea.

Porque las etiquetas son fáciles de poner en los enemigos, pero muy difíciles de aceptar cuando caen en gente que idolatramos desde la ignorancia y la incultura.

Hay diferentes tipos de libros: los que merecen la pena, los que jamás olvidas, y los que guardarás llenos de marcas y de círculos de lápiz en su interior; y este son estos tres al mismo tiempo.

Tanto por el estilo de escritura como por lo que nos cuenta, así como por la carga histórica imposible de debatir, esta es una obra que debería estar en todas las estanterías que deseen ser llamadas algún día Librerías, para alejarse así de ser solo un agujero en un rincón con montones de historias que solo sirven para entretenerse.

¿Y es que qué sería de nosotros sin la memoria o el conocimiento?, ¿podríamos volver a vivir episodios del pasado si le damos la espalda a la verdad que hemos dejado atrás en el tiempo?

Bueno… sal al balcón, mira nuestras calles, y ahora pregúntate por qué nos quieren solos, separados, y tontos; después vuelve arriba, y lee las preguntas que os he hecho en el cuarto párrafo.