Desde que recibí la invitación para ver Hit Man: Asesino por Casualidad, la esperaba con entusiasmo. Aunque al principio tenía expectativas más cercanas a la película coreana “El Bastardo”, la sensación con la que terminé fue muy positiva.
Esta película, basada en hechos reales de manera anecdótica, logra mantener al espectador entretenido durante sus dos horas de duración. Con pinceladas filosóficas sobre la realidad y el constructo del ego, ofrece un enfoque moralista sobre el bien y el mal.
¿De qué trata?
La trama sigue a Gary Johnson, el asesino profesional más buscado en Nueva Orleans. Para sus clientes, es el sicario ideal. Sin embargo, si le pagas para eliminar a un cónyuge infiel o a un jefe maltratador, debes tener cuidado: trabaja para la policía. Cuando rompe el protocolo para ayudar a una mujer desesperada que intenta escapar de un novio maltratador, se convierte en uno de sus propios personajes ficticios, se enamora de la mujer y coquetea con la idea de convertirse él mismo en un criminal.
El planteamiento es divertido y, al mismo tiempo, algo psicótico. Desde otro enfoque narrativo, podría considerarse sin duda pariente del Joker.
De filósofo a sicario
Uno de los aspectos que más me ha gustado es cómo introduce teoría filosófica, específicamente sobre la creación y el constructo de la identidad. Este baile teórico dentro de la narrativa sirve como narrador para entender lo que está ocurriendo en la mente del protagonista. Las menciones a las diferentes teorías se materializan luego en las decisiones que toma el personaje.
De hecho, de manera muy hábil, al final de la película te planteas si el desenlace es el correcto, si la decisión final, a pesar de no ser aclamada, es la correcta o no. En otras palabras, el director logra que el espectador empatice con la mente del sujeto que opta por la mala acción, dejándote con la sensación de que es la correcta.
En conclusión, Hit Man es una película que te hará pasar un buen rato, apta para todos los públicos y con una presentación simpática de hechos y personajes.
Mi calificación es un 7.
