¿Estás contento de esta experiencia?
Si, ha sido una peli que la verdad muy bonita de hacer y con Alberto (San Juan) también ha sido un regalo, que no lo conocía. Estoy teniendo la oportunidad desde hace unos años de trabajar con los grandes de nuestro País y es un honor.
Los papeles, a los que ejercéis esta profesión, os ayudan a conocer un poco a vosotros mismos. ¿En qué te ha ayudado esta cena?
Bueno al final para mi la comedia tiene algo, el reírte de ti mismo. Hay algo de este ejercicio que me parece muy interesante. Y después, lo venía pensando estos días al estar promocionando esta película, tener la oportunidad de conocer como trabajan los grandes. Me llevo que estoy teniendo la suerte de trabajar con ellos que me están enseñando mucho.
Manuel, aparte de maravilloso guionista, es un director genial. A ti que te gusta juguetear con tus personajes ¿cuánto te ha dejado improvisar y divertirte?
Me he divertido mucho y he sufrido también. Parte de la comedia es esto también. Sufrir, para, en ese dramatismo, hacer reír a la gente. El guión estaba bien escrito, no había mucho chance para la improvisación. O sea al final estaba escrito también por Yolanda García Serrano, Joaquín Oristrell que son unos maestros entonces poco había que tocar porque se improvisabas te ibas un poco de la estructura y del tono que le querían dar que estaba tan claro en papel. Así que poco.
¿Qué es lo más bonito que te ha regalado esta profesión?
Como actor al final una vez que acabas de rodar ‘abandonas’ el proyecto, pero como director tienes que seguir montando, con la postproducción durante meses igual hasta un año. La película como director te coloca en otro lugar. Para mi hoy en día el recuerdo más bonito que tengo ahora mismo de esta profesión es ‘Mi soledad tiene alas’ sobre todo porque es con mi hermano y para mi fue algo precioso de hacer.
En varias ocasiones has dicho que se te bien cocinar lasaña. Si tuvieras que invitar al Teniente Medina a casa a cenar algo ¿a qué le invitarías?
Pues a esa lasaña ¿no? (risas) o una pasta, una carbonara. Algo italiano.