Llamar a la Reina roja y alertar a todas las autoridades, porque ahora mismo va a haber un cinecidio de dimensiones tarantinescas.
Poneros el mono de cocinar metanfetamina, porque estoy seguro que os va a salpicar. Estaba ansioso por seguir tachando victimas de mi lista, lo que no me esperaba es encontrarme con este esperpento.
Ya os aviso de antemano, no pienso decir nada bueno y ni de coña, voy a ser delicado.
Es que estoy como youtuber con su primer unboxing, no sé por donde empezar.
¿Cuál es el plomazo?
Es que esta película, ya nace abortada antes incluso de gestarse. Para que lo veáis, voy a ser tan canalla de copiar la sinopsis de Filmaffinity: “Una escapada en hidroavión a la Gran Barrera de Coral australiana se convierte en una pesadilla para un grupo de jóvenes cuando son atacados por un gigantesco tiburón blanco. Varado en alta mar sobre un frágil bote salvavidas, el grupo tendrá que usar todo su ingenio para resistir a la monstruosa amenaza que les acecha bajo el agua.”
Como veis un argumento nada trillado, sobre el cual no se han hecho tropecientas películas. Como es de esperar, esta no ha sido la excepción.
Voy poniendo los plásticos…
Es que es mala hasta para elegir los giros argumentales. Vamos a ver guionista en prácticas, si tu vas a una playa y ves un cadáver putrefacto, de alrededor una semana. Explícame donde queda la lógica de decir:
“¡Oh Mike, deberíamos ir a buscar su barco hundido por si queda algún superviviente”
¿Algún superviviente? ¿Una semana después? ¿En una zona petada de tiburones igual de grandes que un coche?
Claro, es que resulta que Mike tuvo un encuentro con un tiburón en el pasado. Su consciencia y su forma de ver la vida, le indica que debe salvar a todo aquello que huela a escualo.
Lo que eres, es un poco monguer. Si en tu lógica, aplicaras el sentido común hubieras dicho “Mejor no nos arriesguemos, que voy a ser padre y los tiburones son muy peligrosos” ¡PAMMM! Fin la película, ya nos ahorras setenta minutos de giros argumentales de risa.
Eso no es lo mejor. SI alguien sabe algo de tiburones, entenderá que estos grandes escualos no atacan por que sí. Ni todavía menos, son agresivos y violentos por naturaleza. Pues nada, esta película, todavía se queda en la parte superficial y poco trabajada de la psicología animal. “Es una animal grande, por eso es peligroso” Imagínate si el director anda perdido, que el tiburón superastuto, le tiende trampas con señuelos e incluso les hunde el hidroavión.
Es que me imagino el director presentando el proyecto:
_ Tengo una idea brutal sobre tiburones.
_ Otra peli igual, venga dime.
_ Esta vez vamos a explorar la psicología de las victimas, mediante una introspección en alta mar mientras son acechados por una manada de tiburones. Donde se verá el sufrimiento por sobrevivir del ser humano, usando todo su ingenio.
_ ¡¡Te la compro!!
Valiente peñazo, en el cual el mayor ingenio de los protagonistas, es remar y dormirse con el remo colgando. Claro, el remo se le cae de la barca y tienen que ir nadando a recogerlo. ¿Quién va a recogerlo? La mujer rubia embarazada, en un alarde de valentía. Momento que nos da, o lo intenta, un poco de tensión. ¿Cómo lo hace? Plano de ella en el agua, plano del interior oscura del agua, sube la música y plano picado de ella. Así durante cinco minutos y no pasa nada.
Todo bien cargadito de estereotipos, por supuesto. ¿Cómo no iba el guapo de la peli a matar a un tiburón con su nardo?. El tío se encuentra una navaja para cortarse las uñas y dice “Yo soy biólogo marino y sé que los tiburones tienen un cerebro pequeño, le atacaré con precisión y lo mataré” (Introduzca una carcajada enorme y duradera)
Ya para no cebarme más, el final. Los genios cargados de ingenio, están a apenas doscientos metros de la costa y ¿sabéis lo que hacen? Con dos bengalas que le quedan, en vez de lanzarlas y alertar a alguien para que les ayuden, lo que hacen es tirarse de cara a por el tiburón “Dispárale en la boca o en el ojo” Claro una bengala debajo del agua contra un tiburón de casi una tonelada. Ingenio, en estado puro.
En resumen
Van dos chinos, dos rubios y un australiano y se lo comen dos tiburones por tontos.
P.d: Los planos eran bonitos.
