Las mujeres que fuimos es la primera novela de Mayka Jiménez de Aranoa, un retrato generacional que reflexiona sobre el amor, los deseos y la nostalgia, y que captura las vivencias y las transformaciones de las mujeres que fuimos y seguimos siendo.
Tres mujeres, dos ciudades y un secreto
La literatura contemporánea nos sigue regalando relatos donde la memoria y la identidad se entrelazan en historias profundamente humanas. Las mujeres que fuimos, la primera novela de Mayka Jiménez de Aranoa, nos sumerge en un viaje emocional que recorre el Madrid actual y la Barcelona de 1992. A través de las vidas de Paula y Adriana, la autora construye un mosaico generacional que aborda temas como el amor, la nostalgia y las decisiones que marcan un destino.
Paula enfrenta la pérdida de su madre a causa del alzhéimer, un proceso que la obliga a reencontrarse con su propio pasado. Por otro lado, Adriana llega a Barcelona con la ilusión de estudiar Medicina, pero pronto se ve envuelta en circunstancias que la obligarán a tomar decisiones que cambiarán el curso de su vida para siempre. Ambas historias se entrelazan en una trama que es, a la vez, un espejo y un homenaje a las mujeres de diferentes épocas.
Una historia de reconocimiento y orgullo
En Las mujeres que fuimos, Jiménez de Aranoa nos recuerda la importancia de abrazar nuestras experiencias y aprender de ellas. La autora lo expresa con claridad: ‘Llega un momento en que las mujeres necesitamos reconocernos en quienes fuimos, pero también sentirnos orgullosas de quienes somos y de las mujeres que seremos’. Así, la novela se convierte en una invitación a la reflexión y el autoconocimiento, celebrando la fortaleza de las mujeres que han forjado su camino y aquellas que aún están por venir. penguinlibros
Mayka Jiménez de Aranoa: una voz generacional
Mayka Jiménez de Aranoa es periodista, consultora de comunicación y doctora en Arte. Tras una carrera destacada en la moda y la belleza, en 2011 fundó su propia agencia de marketing y comunicación. Su actividad en redes sociales, iniciada con un blog en la revista ELLE en 2007, la ha consolidado como una referencia generacional. Con su salto a la ficción, demuestra que su mirada sobre la sociedad y las emociones humanas sigue siendo tan aguda como siempre.
Las mujeres que fuimos es más que una novela: es una conversación intergeneracional sobre la identidad, los sueños y las decisiones que nos convierten en quienes somos.