Vistalegre + Aina, el evento del año

Reducidos a una mínima expresión en la que tan solo tiene cabida un concierto al año como máximo, sobretodo cuando Pau está por aquí ya que es el único que vive fuera del país, ésta vez la cosa ha llegado a confirmarse como una mini gira que los iba a llevar a ejecutar cuatro fechas en el territorio nacional, comprendiendo el 17 de Mayo en Barcelona, el 18 en Vidreres, el 19 en Madrid y el 20 en Zaragoza, pero que finalmente ha tenido que ampliarse a una fecha más después de la descomunal respuesta obtenida en BCN, agotando sus entradas para la sala Be Good en pocos días, obligando así a la banda a  abrir una nueva tanda de entradas para el 16 de Mayo y contentar a los ávidos fans del combo barcelonés que se cuentan por cientos en la ciudad CondalAina fue, han sido y serán la banda de post-hardcore más referencial del estado desde que a mediados de los 90 empezaran a divertirse con esto de la música, tocar por puro placer, por amor al movimiento y al arte, a la música y a los sentimientos, una ecuación en la que no entraba, ni ha entrado jamás, la variable del dinero. Por ello lo de mantenerse tan íntegros e inalterables.

Recibido como uno de los eventos del año por muchos, los encargados de abrir la noche, una vez confirmado que Les Cruet quedaban apartados del cartel por temas de salud (desde aquí le deseamos a Laura una pronta recuperación), eran los ocasionales e impagables Vistalegre, banda de Sant Feliu formada por el gurú del sonido Santi García a la guitarra y el batería Roger Ortega (ambos en No More Lies) y capitaneados por el multinstrumentista Marc Clos a la segunda guitarra con el añadido de Alfred Alegre al bajo, ofreciendo un show que nos dejó con pitidos en los oídos al menos para una semana. Tomando nuevamente el post-hardcore como su caballo de batalla y añadiéndole cantidades ingentes de furiosas y punzantes melodías distorsionadas hasta niveles de éxtasis, lo de Vistalegre en directo supera con creces las mieles del estudio poniendo en evidencia incluso a unos Aina con un espectáculo de muy alto nivel. Su explosiva visceralidad, su obsesión por la distorsión encontrada incluso en los punteos, sus aristas hacia el noise-pop anfetamínico y el punk rock de carácter emo noventero, dio a luz a una media hora de concierto que quedará grabada en la mente de sus asistententes como una de las descargas de watios más intensas y emocionantes capaces de ofrecer dentro del estilo. Ahora solamente podemos esperar que firmen una pronta continuación a su debut autotitulado del que en enero de este 2018 se han cumplido 8 años.

Y llegaba el momento soñado, el momento de volver a tener sobre las tablas a ArturTitiPau y Álvaro para descargar, con todas las ganas del universo, sus hits atemporales en los que el rock y el hardcore se daban la mano en una conjunción tan demencial como impresionante. Comenzando la noche con la primera canción de su último largo, Presbyopia funcionó como el necesario calentamiento de motores, tanto para la banda como para el público, tomando un considerable crescendo de ejecución, garra, fuerza, pegada y contundencia a medida que se iban sumando los temas (y las cervezas) al repertorio consiguiendo llevar al público hasta el punto de formar pogos y realizar surf crowd sobre una media de edad que estaba por encima de los 40 en muchas ocasiones. Algo nada fácil de conseguir para un grupo en esas condiciones de público, pero que para los fans de Aina se convierte en una liturgia tan necesaria como evidente dentro de sus conciertos. Rodeados de amigos, familiares y seguidores de toda la vida, Aina triunfó por todo lo alto dejando claro, una vez más, el motivo de estar catalogados como una banda legendaria dentro de la escena post-hardcore nacional. Tanto es así que incluso cuando los componentes de la banda quisieron bajar del escenario para tantear al público allí presente y finalizar su actuación, muchos de ellos se organizaron en las escaleras para que no pudieran bajar y continuaran con su actuación (-“todas otra vez”- era la frase más repetida) para disfrute del respetable. La noche se cerró con una versión de Mega Citry Four y un total de 85 minutos de actuación para los anales de la escena. A destacar el triple sold-out de Aina en tierras catalanas como muestra inequívoca del amor incondicional que se les profesa en su tierra. Nos vemos dentro de un par de años más y muchas gracias por el regalo.

+ Info: VISTALEGRE + AINA / 17 mayo 2018 / Sala Be Good (Barcelona) / Precio : 8 euros (gastos incluidos)

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