Jaque Mate, Elisabeth M. S.

 Jaque Mate, Elisabeth M. S. 

Ganas de más

SINOPSIS

¿Nunca has pensado que la vida es como un tablero de ajedrez? Si mueves mal las piezas, recibes un jaque mate que sentencia la partida, sin opción a remontar, perdiéndolo todo. Pero… ¿y si te dan una segunda oportunidad? ¿Y si quién te ha hecho el jaque decide enseñarte los errores para que aprendas de ellos? No es tarea fácil, pero nada es imposible si reside el esfuerzo en ello.
Carolina es la elegida para esa segunda oportunidad, y deberá enfrentarse a situaciones, sentimientos y secretos del pasado que la golpearán en el peor momento de su vida, enfrentándola a todo lo que se había perdido o lo que no había querido ver. Porque unos ojos no pueden ver con una mente ciega.

OPINION

Si algo sabe Elisabeth es mejorar, por supuesto si en El Deseo de Perséfone se había ganado un 9 de 10, en Jaque Mate tiene el diez más que merecido. No sé qué haré a partir de ahora, creo que para la próxima novela que publique romperé el marcador y tendré que darle un once sobre diez. Con escritores así es dificil encontrar algún punto débil que no sea un quiero más de esto y lo quiero ya.

TÍTULO

Jaque Mate

AUTOR

Elisabeth M. S.

Nº PAGS.

192

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NOTA

10/10

Jaque Mate es una novela de superación, pasión y amor. Lo que más me gusta de los personajes que crea Elisabeth es que siempre son mujeres fuertes, que sufren pero que le echan ovarios y pueden con todo. Eso me fascina. En esta novela, la protagonista es fuerte a pesar de sus circunstancias y da una lección generalizada de que todos, si queremos, podemos con lo que nos echen.

Carolina, la protagonista de esta novela es una bailarina de ballet a la que vas a querer matar al principio, pero que después te atrapa hasta que te enamoras de su actitud, de su fuerza y de todo lo que va consiguiendo. Un personaje único, que la autora convierte en el más importante aún cuando abundan las novelas con estos personajes de relleno o secundarios. Elisabeth ha sabido darle protagonismo a un personaje que no es perfecto, pero que se te mete dentro poco a poco, a medida que conocemos a esta bailarina.

Carlota, hermana de Carolina, es la encargada de darle una sacudida metafórica para que espabile y poco a poco se convierta en una mujer más humana y fuerte. También tiene su propio lío mental con Nacho, el hombre que la vuelve loca -casi literalmente-.

Edu… ¡Edu, Edu, Edu! De Edu os váis a enamorar desde que aparece hasta el final de la novela. Es un músico y conductor de ambulancias que lo tiene todo. Es el yerno que toda madre quiere, el novio que todos deberíamos tener y/o del amigo que no querrás alejarte. Todo el mundo debería tener un Edu en su vida.

Y Nacho, terapeuta de Carolina. Ese hombre dan ganas de matarlo y comerlo al mismo tiempo. Por una parte es todo un profesional, pero de esos que se toman la molestia en no hacer las mismas consultas a todos. En el caso de Carol ha sabido ser paciente y avanzar con ella al mismo tiempo que la trataba con una cercanía digna de alguien al que le gusta su trabajo. Pero por otro lado, él mismo es un auténtico desastre cuando se trata de su vida personal. Los terapeutas son humanos, y Nacho lo ha sido, muy bueno ayudando a la gente y un caos con si mismo.

Precisamente de Nacho rescato una frase que le dirige a Carolina, la cual me ha parecido preciosa:

”El primer día que entraste por la puerta, eras un iceberg. A día de hoy, lo sigues siendo, pero te estás aproximando a un océano más cálido”.

Con Elisabeth la única parte mala de sus novelas es siempre la misma; que te quedas con ganas de más. Tiene una magia escribiendo que -a día de hoy- no he visto en nadie más. Sus personajes son reales, fuertes y con personalidad, su pluma impecable y hasta las portadas de sus novelas te atraen. Nadie es perfecto, pero ella está muy cerca de rozar la perfección.

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