INFERNO

El ganador de un Óscar Ron Howard regresa para dirigir Inferno, el último superventas de la multimillonaria serie de libros protagonizada por el profesor Robert Langdon, personaje interpretado por Tom Hanks, y escrita por Dan Brown (El código Da Vinci). La aventura está servida.

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Tras el éxito internacional de El código Da Vinci (2006) y Ángeles y Demonios (2009) llega Inferno, la tercera y esperadísima adaptación de la serie de novelas de Dan Brown, con Robert Langdon como protagonista. Inferno, la última incorporación a la franquicia de mil doscientos millones de dólares, fue un superventas en 2013, probando así que los lectores de todo el mundo no se cansan nunca de Robert Langdon.

La película vuelve a reunir al cineasta Ron Howard, que ha dirigido recientemente el aclamado documental de The Beatles Eight Days a Week: The Touring Years, con Tom Hanks, que regresa en uno de sus papeles distintivos encarnando al agudo e ingenioso Langdon. Hanks ha explicado por qué perdura el atractivo de la franquicia. “Hay algo que Dan Brown ha llegado a entender –a todo el mundo le encanta un buen rompecabezas, especialmente uno en el que de verdad puedes averiguar las pistas una a una y resolverlo”, afirma. “Estas películas le dan eso al público –es casi una película interactiva, y ha sido así desde El código Da Vinci”.

La trama de Inferno nos sitúa en Florencia con el famoso especialista en enigmas, profesor Langdon, siguiendo un rastro de pistas relacionadas con el mismísimo Dante. Cuando Langdon se despierta con amnesia en un hospital italiano, forma equipo con Sienna Brooks (Felicity Jones), una doctora que él espera que pueda ayudarlo a recobrar la memoria. Juntos se embarcan en una carrera contra reloj por Europa para evitar que un lunático libere un virus a nivel global que arrasaría con la mitad de la población mundial.

cartel_infernoHanks ha comentado que “el Infierno para Langdon en la película es tanto un estado mental como una experiencia muy física ya que sufre terribles dolores de cabeza y le tortura el hecho de que desconoce el por qué”.

Inferno es la entrega de la franquicia con más estilo visual hasta el momento, con una serie de secuencias de sueños crípticos que llevan al público dentro de la cabeza de Langdon y aportan una sensación completamente diferente a episodios anteriores. Eso es precisamente lo que el director Ron Howard trae a esta serie, de los 23 largometrajes que ha rodado durante más de tres décadas como director, la única secuela que ha elegido dirigir es la de Ángeles y Demonios e Inferno. “Ha habido personajes a los que adoro tanto como a Robert Langdon, pero siempre me gusta obligarme a hacer algo diferente. Es más interesante que repetirse con lo mismo”, explica Howard. “Sin embargo, eso es lo mejor de las películas basadas en libros de Dan Brown –cada una de ellas es muy diferente y él explora temas muy diversos en cada aventura. «Inferno» es hasta ahora la novela más diferente en cuanto a estilo. Con esta serie, tengo la oportunidad de volver a reunirme con un personaje que adoro, a la vez que continúo obligándome a ir en una nueva dirección”.

Una de las razones por las que los libros de Brown conectan con el público es su ingenio para convertir misterios reales de la Historia en thrillers emocionantes para el público actual. En Inferno, la fuente de inspiración subyacente de Brown es el Infierno de Dante. El gran poeta italiano del siglo XIV intentó describir el viaje del alma hacia Dios, con el rechazo del pecado como primer paso. En el poema épico, el propio Dante es dirigido a través de nueve círculos del Infierno, donde ve a pecadores impenitentes castigados por la justicia poética: adivinos que tienen la cabeza al revés, incapaces de ver lo que viene en adelante; políticos corruptos de “manos sucias” sumergidos en brea hirviente. Los mayores castigos están reservados para los peores villanos de Dante, los traidores: en las tres bocas de Satanás, para ser masticados durante la eternidad, están Casio y Bruto, que asesinaron a Julio César, y Judas Iscariote.

Para Brown, el desafío fue llevar la obra de un genio que ha inspirado a lectores y artistas durante 800 años y encontrar los elementos que la convirtieran en un thriller de Robert Langdon. La respuesta llegó cuando Brown se imaginó cómo sería una idea moderna del Infierno, creando dos conceptos que encajan a la perfección: por un lado, un mundo superpoblado en el que miles de millones de personas son incapaces de hallar sustento, y por otro, una enfermedad que elimina a la mitad de la población mundial. Para este Infierno en la Tierra, Brown tomó prestada la idea de Dante de la justicia poética: para castigar a la humanidad por poblar el mundo más allá de la capacidad del planeta, un villano propagará una enfermedad mortal que acabará con miles de millones de personas.

Así, el éxito está asegurado con esta nueva entrega de la franquicia, compuesta por las películas basadas en los libros protagonizados por Robert Langdon, porque como en el resto de las películas de esta serie, aprendes algo, hay grandes personajes, viajas por todo el mundo y te mantienen con el corazón en vilo. Cine divertido y de calidad para todos los públicos.