E3 2016:
el hype por los suelos
Antes de comenzar a escribir algo mucho más afilado y acusador que halagador respecto a la última edición de la Electronic Entertainment Expo -lo que todos conocemos como E3-, aclaro que no olvido ni obvio algunas de las novedades que se han colado entre la gran cantidad de cosas que ya sabíamos que iban a decirse en las conferencias; como Fe, uno de esos juegos que podríamos incluir dentro de la categoría de “indie”, con unos gráficos muy característicos, una gran banda sonora y una apelación directa a los sentimientos si no fuera porque la mano de EA sujeta este proyecto. Tan solo es que las cosas, a mi parecer negativas, pesan más.
En todo un año, desde la edición anterior, no parece haber cambiado prácticamente nada. Seguimos teniendo un amplio horizonte de “nuevos juegos” compuestos en buena parte por remasterizaciones y continuaciones forzadas de sagas. Y no solo eso, sino que además este año el descaro ha llegado al nivel de enseñar un gameplay más y ponerle fecha de lanzamientos a títulos que ya nos enseñaron por encima el año pasado. No es de extrañar que tras esta edición, más que resolver incógnitas, se hayan abierto más frentes: ¿Qué ha sido de Kingdom Hearts 3, o el rumoreado 2.9? ¿Nada que enseñar sobre la supuesta inminente llegada de la Nintendo NX? Este año, ni siquiera ha habido una “guerra” entre los grandes titanes de Microsoft y Sony. Éste último, por su parte, mantuvo el listón a un buen nivel sobre el resto de conferencias que carecieron de emoción y contenido; como en la de Nintendo, en la que solo pudimos saber brevemente sobre dos de sus juegos a pesar de estar confirmados más títulos: The Legend of Zelda y Pokémon. Algunas “luces” a las que aferrarse entre el humo, los nuevos modelos de consola de Microsoft, Mass Effect Andromeda -aunque sobre él ya vimos algo el año pasado-, la remasterización de Skyrim -más remasterizaciones-, Metroid: Become Human -más continuaciones-, Battlefield 1, Death Strading -aunque de éste habría que ver si lo que llamó la atención fue la figura de Kojima más que el propio juego- o Dishonored 2; y algunos anuncios que nos hacen perder un poco más la esperanza de encontrar algo decente que jugar en el próximo año: Titanfall 2 y Watch Dogs 2 -parece que el la rápida muerte de estos dos juegos no ha sido señal suficiente como para parar el desarrollo de una segunda entrega- y DLC`s hasta hartar.
Quizá sea exagerado sentirse decepcionado, pero este evento es uno de los que más repercusión y peso tienen a nivel internacional y se suele esperar bastante de él. Personalmente, en estos 4 días que dura el evento espero ver cosas nuevas, saber en qué se han estado empleando estos 12 meses las desarrolladoras y compañías; no quiero volver a ver ese vídeo que mostraron a principios de año, ni que me digan que van a rescatar del pasado un juego exitoso y lo van a maquillar para venderlo como si fuera nuevo, o que el año pasado las gafas de VR fueran la tendencia futura y este año no nos enseñen en primera línea todo lo que nos puede ofrecer siendo que está a la vuelta de la esquina su lanzamiento al mercado de masas. Da la impresión de que el listón ha bajado drásticamente de una edición a otra, ya sea por las constantes remasterizaciones o por la extraña decisión de algunas compañías de no hablar sobre algunos de sus proyectos a pesar de estar confirmados oficialmente y sus lanzamientos a la vuelta de la esquina.
