Ante todo, humanidad

Y es que con el tiempo la industria del cine se olvida, o mejor dicho hace obvias las historias de personas. Superproducciones cargadísimas de efectos especiales, personajes en CGI o mundos utópicos de fantasía. Con esto no quiero posicionarme en contra de los géneros fantásticos, si no que curiosamente, son las historias que reflejan problemas reales las que arrasan con los premios y consiguen conectar con los públicos.

Dejando aparte las monsergas humanistas, quiero presentaros mi opinión sobre tres películas nominadas a los Oscars y que, obviamente, tratan sobre problemas humanos.

Wonder

La lucha por encajar nunca es fácil y menos cuando te enfrentas a la crueldad de los niños. El protagonista de Wonder no eligió el problema que tiene que afrontar, pero si la actitud con lo que afrontarlo.

Sin duda una película que te marca y te hace reflexionar sobre la vida y la importancia que la sociedad les da a las apariencias y no a las emociones.

Desde un punto más técnico, señalar la brillantez con que se cuenta lo ocurrido y como el guión te atrapa en lo personal de cada personaje.

«Sé amable porque todos están librando una batalla, y si quieres saber lo que los otros son, solo tienes que mirar» 

 

Three Billboards Outside Ebbing

No existe nada más poderoso que una madre resentida con el mundo. La venganza se justifica con lo que le ocurre al personaje principal, y sobre todo por la incompetencia de aquellos que tienen proteger al pueblo.

Tres Anuncios en las Afueras (así se ha traducido el título en España) tiene una gran idea de fondo, que se construye bajo la magia de la publicidad y su poder de alarmar.

Desde luego podría decir muchísimas cosas que me gustaron de esta película, pero necesitaría otras quinientas palabras. Simplemente verla y disfrutar, me lo agradeceréis.

“- ¿Quién habló contigo, Red? ¿Willoughby? Nadie vino a verme.
– ¡Maldita sea que no!
– Se está muriendo, Mildred.
– ¡Todos estamos muriendo!  

 

 

Lady Bird

Desde luego no es la que más me gusta de la tres, pero aun así es digna de mención porque te emociona y es fácilmente vinculable a emociones que todo adolescente ha vivido. Este film, me pasa igual que en su momento Moonlight (2017), aparece en un momento justo con una temática exacta.

Lady Bird te emociona, conecta con tu lado teeneger y te hace recordar tu época de instituto y eso, curiosamente es la magia de esta película.

“- Quiero que seas la mejor versión de ti misma 
– ¿Y qué pasa si esta es mi mejor versión? “

 

En resumen, estas películas son una buena elección para llorar a lagrima viva y darte un respiro para reflexionar. Desde luego, este mundo cada vez se está volviendo más frio y sentir el calor de las emociones nos devuelve a la realidad.